Hubiera querido que fuera una postal.
Podría haber sido una postal desde Nueva Zelanda. Así quiero que me salgan: sueltas. Hace muchos años flirteaba con la posibilidad de mandar una postal así, pero aún no sabía cómo hacerlas. Está pintada sobre un folio corriente y moliente, por aquello de la presión que te produce el papel bueno, impidiendo que salga nada sino encorsetado.Debería pegarla a un cartón y enviarla con un sello, a la vieja usanza. Tal vez lo haga. Como de costumbre el escáner no reproduce los auténticos tonos del dibujo.
3 Comments:
Un bonito cielo de acuarela, sí señor.
11:47 p. m.
Ufff qué mejor postal... Está genial... Me pregunto cómo quedaría con sol... Como siempre, alucinante Álvaro y gracias por compartirla
7:11 a. m.
pero, entonces ¿vas a Nueva Zelanda? ¡Si recibo una postal así la dejo en el frigorífico un año entero! Stephan
7:29 a. m.
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