Esos jueves.

Sé que debería ponerme a dibujar un cómic, mil veces prometido. Las oposiciones me impiden hacer lo que debo: dibujar. Pero sé que sólo son excusas. En otras ocasiones era el miedo. O la vagancia. O el vacío. De esta vez no pasa. Publicaré una tira de cuatro viñetas antes de que acabe Abril. Gustará, porque por una vez, la pequeña historia que en ella se cuenta me gusta a mí también.