sábado, marzo 29, 2014
martes, marzo 11, 2014
La puerta de oriente.
Apenas dibujé mientras estuve en Estambul. Es lo que tiene visitar una ciudad rica y desconocida...te puede la curiosidad. El carácter turco- por mucho que sean europeos, son fenicios- hizo de las suyas y nos timaron en un taxi unos cuantos euros. Así es que a pesar de lo visto, oído y olido me llevo una impresión amarga de la ciudad.
Este dibujo lo hice en la calle, muerto de frío, antes de ir a un baño turco. Trataba de acabarlo cuando entreví un bulto a mi izquierda. No me molestó comprobar que alguien cotilleaba a mis espaldas, al contrario que la mayor parte de las veces, y menos aún cuando descubrí que era la modelo acompañada de su amiga. Se presentó en inglés, me pidió sacar una foto del dibu con el móvil y luego otra del autor junto a su obra. Nos despedimos. Nunca me habían hecho la segunda petición.
Como siempre, las imágenes a través de la lente aquí.